domingo, 17 de mayo de 2009

CAPITULOS 3 (2ª PARTE)

A las ocho ya estaba arreglada para irme, pero que hacia una hora por ahí, bueno en Madrid se podía tardar una hora en llegar a los sitios. Me había puesto unos vaqueros muy estrechos, con unas botas de tacón negras por fuera, llevaba un jersey de cuello alto negro, con un abrigo de manga corta de lana. El pelo decidí dejarlo suelto, porque con el cambio de look que Claudia me había hecho hacer aun no sabía cómo dominarlo. A las nueve en punto estaba delante del hotel, pregunte en la recepción y le llamaron a su habitación, a los cinco minutos lo vi aparecer, iba con unos vaqueros desgastados, unas Converse y un abrigo negro, debajo del cual llevaba un jersey de cuello alto negro, era un estilo muy pop, estaba muy guapo, aunque reconozco que le quedaba mejor el traje.
Fuimos de tapeo, me conto más o menos su vida, tenía 33 años, era de Barcelona, y había conseguido sacar adelante la empresa de su padre, cuando casi se arruinan, su hermano estudio hostelería, y se dedico a hacer platos nuevos, que dio a probar y que le gusto a la gente, por lo que su hermano cocinaba y él se dedicaba a los negocios, tenían un restaurante en Barcelona, que si tenias que reservar mesa debías hacerlo con dos meses de antelación como mínimo, su hermano estaba triunfando mucho, y se estaba convirtiendo en uno de los mejores cocineros de España. El en cambio se dedicaba a organizar los catering con platos de su hermano, lo cual al darse a conocer hacia que mucha gente le llamara para bodas, congresos etcétera. Yo le conté mas o menos lo mío, no había mucha que contar tampoco, no llevaba mucho tiempo en la empresa, pero me gustaba mi trabajo, y se podía conocer gente interesante. Le dije que nos pasáramos por el Perk que mis amigos estarían allí reunidos. Le pareció una buena idea y nos fuimos los dos andando, porque no estaba muy lejos de donde estábamos en aquel momento.
Al entrar en el Perk, vi que estaba Pedro hablando con Marta, lo cual me sorprendió bastante. Me acerque a saludar a Ivana y Juan, y me fui a pedir a la barra, cuando iba hacia ella, Pedro se puso delante mío.

- Hola Elena, siento no haberme despedido de ti, fue todo muy rápido, y tuve que salir al día siguiente para Barcelona.

- Hola Pedro, lo que no se es porque no me contaste nada de esto. Porque si lo sabías, me podías haber dicho algo.

- Lo sé, y lo siento. Yo…

- ¿Qué te lo dijeron esa misma tarde? Estuvimos juntos, podías haberme dicho, me voy mañana, pero no, no dijiste nada, al día siguiente desapareciste, y ahora mismo vuelves a estar aquí como si no hubiese pasado nada

- Vale, no tengo disculpa, pero veo que tú no has perdido el tiempo, verdad? ¿Quién es tu nuevo acompañante?

- Se llama Isaac, es director de una empresa de catering en Barcelona, y ha venido hoy a la empresa para prestar sus servicios, pero ha resultado ser todo una falsa de Claudia, que veremos cómo se arregla mañana si aparece

- Ah! Vaya, esta Claudia. Voy a estar unos días por Madrid, más o menos hasta el domingo, podemos vernos?

- Pues no lo sé- me quede mirando a Isaac que salía en esos momentos del cuarto de baño y se acercaba hacia mí con una sonrisa encantadora –no sé como lo voy a tener estos días.

- ¿podríamos quedar el sábado por la noche? Marta me ha dicho que hay fiesta en casa de tu amiga Ivana, podríamos ir juntos – mire a Marta con una cara de pocos amigos y se dio cuenta enseguida de que había metido la pata

- Isaac, este es Pedro un ex compañero de la empresa, era mi entrenador personal en el gimnasio, hasta que de la noche a la mañana desapareció, ahora es actor

- Encantado de conocerte Pedro. Elena, ¿quieres tomar algo?

- Si, gracias, pídeme un gin tonic – mire a Pedro y le dije - bueno ya te llamo y te digo algo del sábado, pero no creo que pueda ir contigo, además tendré que estar antes en la fiesta para ayudar a Ivana.

- Bueno, tienes mi número. Me voy que estoy cansado y mañana tengo que hacer unas cosas por Madrid. Me alegro de verte Elena. Hasta luego Marta!

¿Pero que se ha creído? Que puede venir así como así, y volver a entrar de nuevo en mi vida, como si no hubiese pasado nada? Y encima auto invitarse a una fiesta que ni siquiera conoce a la anfitriona. ¿Pero que estoy diciendo? Tan solo te beso, no te acostaste con él, no tuviste una relación con él, porque me pongo así? En esos momentos me saco de mis pensamientos Isaac.

- Muy majo Pedro, ha hecho buen trabajo contigo. – ni que supieras como estaba antes de que me conocieras

- Ya ves, estuvo muy insistente de que fuera todos los días al gimnasio, en nuestra empresa la imagen cuenta mucho, aunque a mí eso me fastidia bastante.

- ¿Por qué?

- Porque parece que cuenta poco tus estudios, tu inteligencia, solo sirves si eres una cara bonita con un cuerpo bonito. Por ahí, hay chicas regordetas con unos estudios increíbles, a las cuales no se les da una oportunidad por estar gordas, o por no tener una presencia deseable.

- Entonces ¿Por qué estas en Events?

- Pues porque estudie Marketing y Relaciones Publicas, e hice un máster en Administración de empresas, si parecerá que soy muy joven, pero siempre se me ha dado bien estudiar y aproveche la ocasión. Me gusta este mundillo, pero creo que hay gente en la empresa que no debería ni estar, pero claro no soy yo la que lo tiene que decir

- Lo dices por Claudia, verdad?

- Pues sí, últimamente no viene mucho, y si viene desaparece enseguida, llegando tres horas después, alegando que se ha ido al médico, o que tenía hora para la manicura, o yo que sé! Pero todo me lo deja a mí, y llevo tan solo cuatro días en ese departamento, y claro hoy llegas tu y me como yo todo.

- Perdona si mi visita te ha importunado – lo mire a los ojos y le sonreí, ¿Cómo me iba a importunar?

- No es eso, pero me repatean esas cosas, si yo tuviese una empresa, cogería a la gente por lo que sabe y por su experiencia, se que a todo el mundo hay que darle una oportunidad, y seguro que hay gente más competente que Claudia, que aprovecha para comprarse modelitos a costa de la empresa.

- Bueno, esa es la suerte que tenéis, no te gusta ir de compras? – Me miro de arriba abajo.

- No te digo que no, pero me cuesta ganar el dinero, y si, me gusta hacerme caprichos, pero no llevar ropa carísima todos los días, creo que teniendo un fondo de armario bueno, se pueden hacer muchas combinaciones – lo mire, me estaba sonriendo- pero que te estoy contando?

Nos entro la risa a los dos, acabamos nuestros cubatas y nos despedimos de mis amigos. Me acompaño hasta la puerta de mi casa, y cogió un taxi hacia el hotel. Lo había pasado genial con él, con lo serio que parecía en la oficina, y lo divertido que era luego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario